No eres amiga de la luna,
ni has empezado a hablar con las estrellas,
no han escrito para ti, miles de epopeyas,
ni aún te han declarado ángel de la guarda.
No has aparecido aún en los cuentos de hadas,
ni los cantores te han dedicado canciones inmortales,
tú no te has pegado a las cuerdas de una guitarra,
ni han visto tu nombre confundiéndose con el verbo amar.
Tú no has llenado aún el más bello poema,
ni te han dicho que te han calcado en las paredes del sentimiento,
tú no has descubierto frases silentes en tu cuaderno,
ni te han enviado una flecha en forma de suspiro.
¡Pero yo te amo por lo que eres, no por lo que no eres!
Con una fe que nunca se me cansa, porque te está construyendo muchas cosas,
empeñado a contar contigo las flores bañadas en rocío,
abriendo el corazón para que nunca te me vayas.…
Ni sientas nadita de frío.
Ricardo Felipe
Contador de estrellas
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